Alejandro Sánchez
La última novillada de la Gira de Reconstrucción tuvo tres protagonistas bien claros. Por un lado, Diego San Román, mexicano de Querétaro, que ya es casi un torero, con la alternativa pendiente. El Rafi, otro novillero con aires de torero y que torear lo hace de maravilla. Y el tercero, La Ventana del Puerto. La ganadería ha echado una buena novillada para cerrar este breve ciclo que nos ha dejado con ganas de más. Engosillo nº 19, lidiado en segundo lugar, fue premiado con la vuelta al ruedo.
El primero de la tarde fue flojo y San Román estuvo cómodo con un animal sin transmisión. Se dedicó a trastear entre pase y pase y enseñar el arrojo y valor que tiene, pasándose los pitones muy cerca de la taleguilla. Siguió la línea de la quietud y el estar quieto con el tercero, al que mató de una buena estocada. Paseó dos orejas, uno de cada ejemplar.
El Rafi enseñó sus armas con la variedad capotera. Buen concepto y gusto frente al segundo, que tuvo nobleza y calidad. Con la muleta, más de lo mismo. El novillo fue premiado con la vuelta al ruedo y el diestro, con el doble trofeo. Con el cuarto y último novillo, el único de Puerto de San Lorenzo, aprovechó la movilidad del ejemplar para ligar las tandas. Cortó otra oreja con buenas sensaciones.
Y con este buen apartado se dejan atrás las novilladas con picadores, los grandes olvidados de los escalafones, y que las picadas este año están contadas con los dedos de las manos. Urge subir el número de novilladas para el futuro, y eso, posiblemente será posible si se atienden las demandas del Foro de Novilladas, por ejemplo. Por lo pronto, nos hemos quedado con ganas de más.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Herrera del Duque (Badajoz). Novillos de La Ventana del Puerto y Pto. de San Lorenzo (4º). El segundo, de nombre Engosillo, fue premiado con la vuelta al ruedo.
Diego San Román: Oreja y oreja.
El Rafi: Dos orejas y oreja.
Imagen: aplausos.es